jueves, 2 de junio de 2011

MUERTA ES LA MORADA...

Me inclino ante las bibliotecas cardinales. A menundo recurro a ellas. Pero me inclino con un poco de espanto. Las utilizo cuando no puedo hacer otra cosa en absoluto. Lo confieso, no soy hombre de esos inmensos conservatorios de lo impreso. Amo demasiado a los libros para soportar visitarlos tan solo y poder abandonar los volúmenes, a la hora de cerrar, a los guardianes de sus gloriosas Bastillas. Me gusta que los libros compartan mi vida, me acompañen, callejeen, trabajen y duerman en mi compañía, se rocen con las venturas del día y los caprichos del tiempo, acepten citas conmigo a horas "imposibles", ronroneen con al gata al pie de mi cama, o se arrastren con ella en la hierba, doblen un poco la punta de sus páginas en la hamaca de verano, se pierdan y se encuentren de nuevo (...).
Sin duda el dinero no hace la felicidad pero ayuda a comprar libros.

El amante de las librerías. Claude Roy

3 comentarios:

MK dijo...

Genial.
Recuerdo una contra de La Vanguardia donde entrevistaban a Joaquín Sabina y el muy ...decía que había insistido mucho para que sus hijas cogieran el hábito de la lectura desde bien pequeñas y les alentaba diciéndoles que cuando fueran viejas y los hombres ya no se fijaran en ellas y se quedaran solas , siempre agradecerían los consejos de su padre por haberles enseñado a encontrar calor y refugio en los libros...qué estos nunca las abandonarían.
Qué razón tenía el muy jod..

MK dijo...

Por cierto tengo desde hace días a Louis buscando desesperadamente una postal de su tocayo Copito de Nieve , por los quioscos de toda Barcelona , y nada .A ver si me bajo este fin de semana al zoo y le mandamos unos suspiros de amor
a Silvana. Las noticias desde DUblín le arrancaron una sonrisa entrañable.Besos guapas.

Lula Fortune dijo...

Sí, Joaquín Sabina habla como un libro abierto... je, je...pero ¿qué pasa con las que somos guapas y nos quiere todo el mundo? ¿debemos estar condenadas a la ignorancia? ¿no podemos refugiarnos en el abrigo de unas buenas páginas? je, je...
Besitos.

PD: Silvana estuvo de viaje, ay...ya te contaré