Todavía recuerdo el día del funeral de Lubitsch. Willian Wyler y yo llevamos el féretro y, cuando nos alejábamos, dije: "Nos hemos quedado sin Lubitsch". Y él replicó: "Peor aún, nos hemos quedado sin las películas de Lubitsch". Cuánta razón teníamos. Desde entonces, todos hemos tratado de encontrar el secreto.
Billy Wilder
4 comentarios:
That magic touch! Muy buena anécdota.
mi padre a veces usaba esas ligas, y no tenía ningún toque "lubitschiano", sino más bien "retranqueiro"
Fuquiño
Todavía recuerdo el día del funeral de Wilder. Scorsese y yo llevamos el feretro y...
El toque se hereda.
Saludos.
Un abrazo a los tres... efectivamente, hay cosas que no se las lleva la muerte.
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