lunes, 10 de noviembre de 2008

212W, 72nd St


El 212 W de la calle 72, esquina Amsterdam Avenue, está entre dos negocios: un restaurante chino y una tienda de animales.
El dueño del restaurante se llama Danny Chow y es también el dueño del edificio, de un sospechoso local de masajes que hay en el primer piso y del apartamento que nos alquila.
Al lado de la tienda de animales hay un negocio de apuestas. La acera está siempre llena de personajes extraños, semi vagabundos que aparcan su carrito atiborrado de latas vacías, plásticos e indefinibles fardos de tela. Son viejos y desdentados, la mayoría negros, mal vestidos y muchas veces borrachos.

Sobre la tienda de animales hay un gimnasio de yoga que no cierra nunca. Desde la acera de enfrente se les puede ver a todas horas, hombres y mujeres sudorosos, imbuídos de una concentración especial y difícil de entender desde el barullo callejero.



Todo el bloque de de apartamentos está escorado hacia la derecha como un viejo barco varado en la arena. Las escaleras se inclinan peligrosamente y debes sujetarte fuerte para subir: por supuesto, no hay ascensor. El nuestro es el número 4 y está en la tercera planta. Tiene ese aspecto baqueteado y algo impersonal de las casas de alquiler y por qué no decirlo, esa mugre que se acumula tras años de limpiezas superficiales o no-limpiezas. A pesar de todo, se aprecia cierta intención decorativa que lo hace agradable.
Una parte muy peculiar del apartamento son los radiadores de la calefacción, cuya puesta en funcionamiento maneja Danny Chow a su antojo, por más que él asegure que lo hace todo el computer. Cuando esto sucede, suele ser a las cinco de la mañana, los aparatos sueltan agua a presión con un zumbido tan penetrante que no te lo quitas de la cabeza en varias horas.





La parte escorada del edificio afecta al metro cuadrado de cocina y al metro cuadrado de baño. El retrete te obliga a permanecer en tensión hacia la izquierda si no quieres acabar deslizándote hacia la bañera, con lo cual apresura y facilita las deposiciones. La cocina se sitúa al final de una rampita que te lanza al fregadero con decisión y alegría. Está todo calculado.

La pequeña terraza a la que se accede desde el dormitorio es lo más parecido a "La ventana indiscreta" que se puede encontar. Da a la parte de atrás de la manzana y todas las noches antes de correr las cortinas -porque no hay persianas- echo un vistazo a los rectángulos iluminados: un trozo de una cocina moderna y grande, un cálido sillón con una chica morena comiendo, la esquina de una cama, una mesa de trabajo con una librería y una enigmática vidriera en la zona alta. Hay escaleras de incendio y enormes tuberías que rugen todo el día delante de fachadas de ladrillo rojo con ese aire industrial y potente que tienen la mayoría de los edificios de la ciudad.







Me encanta este barrio. Es animado y populoso, a todas horas ves gente por las aceras, en las tiendas, gente que vive , que pasea niños, compra en el supermercado o toma café. No es como esas otras zonas, exquisitas y vacías o esas calles impersonales donde te cruzas con mareas humanas de ojos perdidos.







Con el buen tiempo han florecido en las aceras los vendedores de libros usados, guiones de cine y carteles de antiguos musicales.
En la esquina de la calle hay un kiosko atendido por un hindú, un chico joven y sonriente que flota arropado en aromas de sándalo y frambuesa. Resulta agradable pasar por ese remanso perfumado todas las mañanas camino del metro y responderle con otra sonrisa.

Abril 2005


He rescatado mis notas de hace unos años en Nueva York porque he sabido que la manzana entera donde yo vivía ha desaparecido. Arrasada por enormes equipos de demolición ha pasado al limbo de los recuerdos para convertirse en un moderno y elegante edificio. No podré volver nunca, ni siquiera para satisfacer la nostalgia, al decrépito edificio de Danny Chow y eso me ha producido una extraña sensación de irrealidad.
Arrebatado el espacio físico que me unía a la ciudad como un cordón umbilical, miro las fotografías de lugares inexistentes y el sueño de haber sido neoyorkina -habitante de lavanderías, pobladora de supermarket, compradora de periódicos dominicales- durante unos meses, empieza a desaparecer definitivamente.


21 comentarios:

Mad Hatter dijo...

¡Qué sorpresa! No tenía ni idea de que habías vivido en la Gran Manzana, Lula ¿Por qué regresaste? Si puede saberse. Sí, ya lo sé, soy un cotilla irredento.

The Incredible E.G.O´Riley dijo...

Lástima que haya desaparecido. De todas formas el cordón umbilical que te une a esa ciudad nunca quedará cortado del todo. Estás ligada a NYC igual que a Italia de por vida.


Besos diurnos.

Anónimo dijo...

Jejeje... parafraseando el título de aquella película... has vivido en "La casa más divertida de New York".

Besos de consuelo.

Anónimo dijo...

Vaya. Pues lo siento casi tanto como la envidia que me come por dentro (Niullol no lo pisé). ¡Y ya por entonces le daba bien al palabrismo! ;-)

Lula Fortune dijo...

MAD:¿por qué regresé? porque hay que trabajar para comer, no va a ser todo vivir del cuento y da la casualidad de que mi trabajo lo tengo aquí. No te creas que no me hice ver por el Instituto Cervantes, pero no hubo suerte snif!
Kisses for you.

CAVALIERE: puede que tengas razón, pero es como cuando eras pequeña y te caía un diente: no parabas de pasarte la lengua por el agujero para comprobar una y otra vez que ya no estaba allí.
Besos de lunes tormentoso.

CARRASCUS: y no veas lo que cotilleaba yo con las pilinguis del salón de masajes del chino... fue muy divertido, de verdad.
Besos nostálgicos.

BIRRAMAN: entonces tendrías que firmar ENVEXAMAN ¿no?

EvitaBlu dijo...

Dany Chow me encanta, es como el chino de Karate Kid.
En el ventanal de la primera foto la gente va ligerita de ropa ¿verdad? La cocina es monísima, vale, tal vez las tostadas salían de canto pero es cuca y se ve limpia y tiene un cuadro bonito, el salón sin embargo me parece más inglés y la escalera de Pretty Woman total.
Me gustaría mucho viajar allí y desde luego a tí "que te quiten lo bailao".
Anda pasa por mi casa que estoy descorchando otra botella y así se te hace más llevadero este lunes tormentoso.

Besitos de pura envidia

atikus dijo...

por dios que ganas de volver al "Barrio", este viernes se va una amiga mia y me ha entrado un mono que alucinas, cuando he visto esa calle 72 me estaba acordando de la hamburguesas tan salvajemente ricas que me devoré con el futuro blogurero y compañia el día de mi cumpleaños, a y los papayas...por dios que mono!!!!

y dices que te han cambiado tu edificio?. que poca consideración, ya veran, cuando seas famosa se van a joder y no podran sacar la pasta al sitio ese jaja!!

Besitos con sabor a manzana ;)

Unknown dijo...

AAAAAAAAAAAAAYYYYYYYYYYYYYY
Qué me dices? que aquel sushi picante jamas podre volver a comerlo en aquella mesita torcida???
Que no volveré a Urban Outfighters a "chusmar" ropita?????
Y no volvere a saborear en la esquina aquellos maravillosos perritos del Gray´s Papaya????
Jo.....pues vaya m.......

Unknown dijo...

coño,por que me sale pepita si soy la ratita?????

NoSurrender dijo...

Me estaba gustando tanto cómo lo describías que me estaban dando ganas de pedirte la dirección para pasar por allí cuando tenga que ir a NY. Qué pena!

El Secretario dijo...

Hola Lula.


Poco a poco vamos conociendo facetas tuyas de épocas pasadas, de viajera-bohemia-gallega-mundana.

Aturdido estoy.

Igual digo: me estaba enamorando de ese sitio con ese sospechoso local de masajes, esos montonazos de libros usados en las aceras y ese indefinido "güeyoflaif" tan decadente y suburbial.


Aún hay sitios así.

Por todo el mundo.


Abrazo mundano.

Lula Fortune dijo...

EVA: pues eso es lo que pienso, que me quiten lo bailao, pero me dio un vuelco el corazón cuando vi la foto de la manzana arrasada por las máquinas. ¿qué habrá sido de Danny Chow? ¿y de las pilinguis?
Voy a tener que volver y averiguarlo je, je,je.

ATIKUS: ay! el Gray's Papaya, si estoy salivando sólo de pensarlo. El próximo encuentro bloguero ¡en NYC! en cuanto vuelva FB tienes que ponerlo a trabajar en el asunto.
Besos encebollados.

RATA: hooooola!!!!! sólo yo sé cómo sacarte de la cloaquita je, je.
Pues sólo tiraron la casa en la que vivimos, el local de apuestas y la tienda de la esquina. Espero que el Papaya siga en su sitio. Lo dicho, habrá que volver. Besos.
ratoniles.

LAGARTO: la dirección es el título de la entrada, pero me temo que te encontrarás algo muy distinto. De todas formas, NY está lleno de sitios tan agradables como los que describo. Pero ese era mi barrio, sniff! y era especial para mí.
Besitos llorosos.

SECRE: "viajera-bohemia-gallega-mundana" ay! qué friki suena eso.
Besos desde el lado oscuro.

Anónimo dijo...

I love you baby.

EvitaBlu dijo...

Pepi Ratita ¿por qué nos has abandonado?

X dijo...

NY sin duda es una ciudad única. Lo que no desaparecerán seguro son todos esos buenos recuerdos que guardas.

Nuca dijo...

Efectivamente, iba a preguntar qué fue del Sr. Chow.

nancicomansi dijo...

¡¡¡Yo también "verdeo" de envidia!!! que soy la chica HULK...
que pena, de verdad...parecía tan auténtico, cada esquina del apartamento,de esa calle atestada de libros (que disfrute, no?), las tiendas con sus roñosos letreros, parecía tan personal e intransferible...y todo al traste por lo de siempre...¡A la uniformidad por un supuesto "maqueo!!
Me quedo con lo "viejuno" o destartalado pero con sabor...
(Y oyes, que tu apartamento no estaba nada mal, eh?)

atikus dijo...

Uy que idea! un congreso mundial bloguero en Manhatan jaja

yes we can!!!

pues el FB, ya esta por aqui ;)

Mr Tambourine Man dijo...

He leído un comentario tuyo sobre el cine mudo y la palabra, en "El Tiempo Ganado". He llegado a tu blog, y me ha encantado tu semblanza sentimental de Nueva York.

Voy a seguir leyéndote.
Un saludo,
El Caracol Feliz.

Lula Fortune dijo...

XABIPOP: pues ahora mismo sólo me queda eso. Hay que j...
Besos con sabor a manzana.

OCCAM: ese sería un buen tema para un relato...

NANCI: es que era un barrio genial, y eso de ir a la lavandería y esperar me parecía tan de película!!! Los domingos había mercadillo en un colegio...en fin todas esas cosas como bien dices "con sabor".
El apartamento: cutrillo, cutrillo.
Besos sabrosos.

ATIKUS: FB ya vendría pero no nos hemos enterado(ji,ji,ji)debe estar haciendo un post de Zanzibar de cagarse.
Besos de viernes aburrido. Los besos no ¿eh?, sólo el viernes.

MR TAMBOURINE: encantada de tenerte por aquí y más viniendo de "El Tiempo Ganado".
Alguna vez entré en el tuyo, pero no me atreví a decir nada. Ahora daré rienda suelta a mis palabras :)
Un saludo.

MK dijo...

Habrá que volver , digo yo ...a ver que tal sigue ahora. oye , avisa , vale ?, que yo sólo he estado unos dias hace ya ocho años ...y me han entrado unas ganas leyendo y viendo esas fotos...Y a lo mejor el Day Lewis sigue yendo al parque aquel a leer no?.