JUVENTUD CANÍBAL

¿Qué sucede cuando el mal se revela nacido de la ausencia, de la más absoluta falta de determinación, originado por individuos sin deseos ni conciencia, que deambulan por el mundo provocando dolor y muerte?.

La pregunta de Daniele Brolli, el recopilador de esta antología de relatos, Gioventù Cannibale, solo halla respuesta entre el horror extremo de sus páginas. Editado en 1996, supuso el punto de partida de un joven generación de narradores italianos, hijos de Stephen King y Tarantino, de las historias pulp, del cómic, de la televisión. Una generación que fagocita sin complejos todo tipo de influencias y que explora el género negro de una manera bastante diferente a la de sus predecesores.

Los relatos se olvidan de todo lo que pueda considerarse políticamente correcto: el amor, la amistad, el sexo, la familia, se convierten en vehículos de violencia gratuita,  y desahogo de personajes  inútiles en su maldad, crueles, repugnantes. 

Padres asesinados por una simple prohibición o por dinero, la ruleta de unas piedras lanzadas por capricho desde un puente de la autopista, violaciones festejadas como un día en el parque de atracciones, crímenes con mutilaciones... son gestos carentes de pasión y de sentido que rasgan el velo superficial de la normalidad para demostrar que sus bases se apoyan en un inquietante equilibrio.

Estamos ante narradores que no buscan el consenso de la sociedad, que se dirigen a la sangre como materia de un horror fundamental, como elección entre la vida y la muerte, como muestra de su irreductibilidad. Escritura voraz, cruda, sanguinolenta, incansable, desconcertante . No apto par todos los estómagos pero una curiosidad interesante.