martes, 15 de septiembre de 2009

EL HOMBRE ESPERANZADO


"POR MOMENTÁNEA PRECARIEDAD, NECESITO UNA AYUDA. GRACIAS"

El cartel estaba a los pies de aquel hombre, pulcramente escrito y sin faltas de ortografía. 
Vestía con humildad discreta y limpia: una chaqueta de lana, un pantalón vaquero algo raído y unos lustrados zapatos marrones.
Estaba leyendo un libro amarillento, forrado con un plástico, mientras acariciaba un billete de autobús que le servía de marcapáginas.
Todavía creí adivinar en su mirada la tibieza de un hogar, la rutina de un trabajo, la humeante certidumbre de una sopa...
Pasé de largo, pero no consigo quitármelo de la cabeza.

8 comentarios:

Sir John More dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Sir John More dijo...

Tal vez nos aterroriza vernos a nosotros mismos en su lugar, sabernos a veces tan cerca de ese otro lado...

Ra dijo...

Joder, qué clase.

lu dijo...

Es verdad que muchos/as estamos cerca de ese otro lado, yo lo veo continuamente en mi trabajo. Hay circunstancias que nos pueden llevar fácilmente a esa situación en la que nunca nos hubiéramos imaginado. Una separación, perder el trabajo a una determinada edad, el juego, las drogas, un brote de locura,... o todo a la vez. Es duro verse en una de ésas, SIEMPRE, pero más cuando tu vida anterior era "normalizada" (apoyo familiar, trabajo estable, vida social,...). Muchas personas prefieren robar antes que mendigar. Yo no sé lo que haría, la verdad.

a-escena dijo...

La frase del cartel no tiene desperdicio. Y la descripción que haces de ese señor...Dan ganas de compartir con él lo poco que una tiene, hasta que pase su momentánea precariedad. Bellísimo.

Mad Hatter dijo...

Es muy triste que a estas alturas todavía haya mucha gente que no tenga cubiertas sus necesidades básicas, aunque, una vez cubiertas éstas, siempre seguimos necesitando otras cosas.
Buena foto y excelente texto que refleja de una manera cruda pero emotiva la realidad del momento actual.
Un abrazo solidario.

Mártir dijo...

La proxima vez no pases de largo, lo mismo podemos ser uno de nosotros o quien sabe si en un futuro tu misma...hay que tender la mano siempre amiga y te lo dice uno que colabora activamente en Caritas y cualquier gesto o cualquier atencion, los hace sacarlos de ese estado en el que a veces se encuentran. Que no te lo pudas quitar de la cabeza es buena señal, se llaman remordimientos o misericordia y eso habla muy bien de ti...un beso

Peter Allman dijo...

Es la crisis amiga, la jodia crisis, que ha demostrado a más de alguno que estaba en un lugar que no le correspondia...

Saludos!