lunes, 21 de septiembre de 2009

IO AMO NICCOLÒ


Qué pasaría si juntamos en un edificio a:
Gaetano Cozzamara, un gigoló de medio pelo -míster Tanga Húmedo- a punto de recibir la visita del equipo de fútbol de su pueblo y estropearle la noche con la condesa Sinibaldi.
Roberta Palmieri, una mujer que medita desnuda en la posición del loto, mientras espera la llegada de un compañero de yoga al que quiere echarle el polvo del siglo.
Thierry Marchand, un músico bohemio que delira borracho en la trasera de su furgoneta, con el frac de lentejuelas del hotel donde toca, por un mísero sueldo, lleno de vómito.
Giulia Giovannini, una joven a punto de celebrar una gran cena en su casa cuando descubre que su novio se la está pegando con una de sus mejores amigas.
Enzo de Girolamo, el novio traidor encerrado en el baño con una cagalera bestial -sin papel higiénico- después de tomar una copa servida amorosamente por su novia.
Sukia, una jovencita sadomaso que hace trabajos a domicilio, pensando en sacar de su bolso el instrumento de tortura total y hundirlo en el pecho peludo de su cliente.
El abogado Rinaldi, desnudo, a cuatro patas, con un gorrito de bebé, suplicando a su dominatrix que no, que por favor no, ¡la Epilady no!.


Pues sucedería algo imprevisto, sorprendente, terrible y desternillante a la vez, porque estaríamos dentro del relato "El último Fin de Año del mundo" perteneciente al volumen Fango (1996) de Niccoló Ammaniti, uno de los mejores narradores de los últimos tiempos, al que amo con apasionada e incondicional entrega literaria.

6 comentarios:

Paco Becerro dijo...

Si me dijeras que todos ellos son personajes de la última fiesta del Cavallieri, también me lo creería...

Besos Luliña, ya de vuelta. (yo)

Ra dijo...

Pro-me-te.

Me lo apunto.

Bicos, señora mía.

Jah Work dijo...

yo también me lo apunto, tiene buena pinta!!!

saludos Lula!!

Anónimo dijo...

La situación me parece tremenda. Cuenta algo más, plis. ¿El resto de relatos van más o menos por el mismo camino? ¿hay traducción?

Saludos escuchando a Jeff Buckley, que su voz era toda literatura...

Licantropunk dijo...

Y yo que me esperaba una entrada 'Anticrística'. Bueno, he descubierto un nuevo autor. Nunca el tiempo es perdido.
Saludos.

Lula Fortune dijo...

FB: ya te vi pululando por otros blogs y ¿qué tal el regreso? Pues yo creo que el panorama de Villa Certosa debe ser muchísimo peor que éste que describo. Desde luego muchísimo menos simpático.
Besos reencontrados.

RA: a ver si lo encuentras traducido. Besos.

L'ESBARZER: pues el cuentecillo en cuestión es un mosaico de personajes inolvidables. Todos estos personajes ( y muchos más) viven en el mismo edificio. Sus vidas, en apariencia irreconciliables van a confluir en un único destino. Ammaniti es un maestro en ir narrando y de pronto, ¡zas! tira del hilo y lo que nos parecía un montón de perlas se convierte en un collar eperfectamente engarzado.
Es brutal.
En mi blog tienes una etiqueta dedicada sólo a él y sus demás libros. Creo que hay uno traducido : "Como dios manda" y te lo recomiendo vivamente.
Un beso.

LICANTROPUNK: ni de coña ¿cómo voy a hablar de esa peli después de ti? jajajajaja
Beso escalofriantes.