Lo importante no es llegar primero, lo importante es saber llegar, como dice un sabio proverbio tibetano. Aquí os dejo la "llegada" de un personaje enternecedor en la novela Ti prendo e ti porto via de Nicolò Ammaniti, autor de culto en este blog.
El 9 de diciembre, a las seis y veinte de la mañana, mientras una furia de agua y viento soplaba sobre al campo, un Fiat Uno turbo GTI negro (vestigio de una época en la que, por unas liras más respecto al modelo base, se podía comprar un ataúd motorizado que corría como un Porche, bebía como un Cadillac y se espachurraba como una lata de cocacola) enfiló el enlace que llevaba de la via Aurelia a Ischiano Scalo y siguió por una carretera de dos carriles que cortaba los campos de fango(…).
Se paró delante del monumento a los caídos de Ischiano Scalo y se quedó con el motor encendido. El tubo de escape escupía un humo denso y negro. Los cristales ahumados no dejaban ver el interior.
Después, finalmente, la portezuela del conductor se abrió con un gemido ferroso. Primero salió fuera Volare en la versión flamenca de los Gipsy Kings e, inmediatamente después, apareció un hombre grande y fuerte con una larga melena rubia, gafas de mosca y chaqueta de piel marrón, con un águila apache de perlitas bordada en la espalda. Su nombre era Graziano Biglia.
El tipo estiró los brazos. Bostezó. Se desentumeció las piernas. Sacó un paquete de Camel y se encendió un cigarrillo. Estaba de nuevo en casa.
2 comentarios:
¿Y tú visualizas a Graziano como el Tarzan de Tita?
He estado unos días fuera...
Cuando veo el enlace a tu pirata, me digo: "ya está. Lula siempre con unos años de ventaja en todo... Pero bueno, ya he visto que no era el mismo pirata". Me quedo con el mío por muy falso que sea (ja,ja).
Un abrazo.
PD: Tengo muchas lecturas a la cola... pero tomo nota de Nicolò.
Pues no exactamente no, pero no encontré ninguna otra foto que encajara con la idea de un "tarzán" venido a menos...es fantástico Nicoló... baci.
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