martes, 10 de julio de 2007

LECTURAS DE VERÁN


"Yo Sinuhé, hijo de Senmut y de su esposa Kipa, he escrito este libro. No para cantar las alabanzas de los dioses del país de Kemi, porque estoy cansado de los dioses. No para alabar a los faraones, porque estoy cansado de sus actos. Escribo para mí solo. No para halagar a los dioses, no para halagar a los reyes, ni por miedo del porvenir ni por esperanza. Porque durante mi vida he sufrido tantas pruebas y pérdidas que el vano temor no puede atormentarme y cansado estoy de la esperanza de la inmortalidad como lo estoy de los dioses y de los reyes. Es, pues, para mí solo para quien escribo, y sobre este punto creo diferenciarme de todos los escritores pasados o futuros."


Un verán infame na costa alicantina, castigada nunha urbanización con piscina, mergulleime sen condicións no desencanto, pero este home salvoume a vida. Chámase Mika Waltari e foi un escritor rápido e talentoso que saltaba dun xénero literario a outro con facilidade. Ben é verdade que a fama veulle das súas novelas históricas, entre elas este Sinuhé, el egipcio que devorei febrilmente. Anos despois vería unha película acartonada e desvaída de Michael Curtiz, unha xoia para frikis, pero a novela pasou encher os andeis da miña vida para sempre.

Mika Waltari sofría insomnio que aliviaba con xenerosas doses de alcohol. Pode que fora un home intratable, seica por iso comprendeu tan ben a miseria humana e mesmo a súa xenerosidade. Gosto de imaxinalo nesas noites/días finesas mirando pola ventá con ollos extraviados o incerto e sinuoso cauce do Nilo.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Sabes, Lula? Yo también fuí un fan del médico Sinuhé. Y por eso luego me puse a leer "El Etrusco", también de Waltari, pero lo tuve que dejar a medias porque me aburría más que con "El péndulo de Foucault".

Lula Fortune dijo...

De Waltari no quise leer nada más. No sé, llámale superstición o presentimiento pero no quise pedirle más y estropearlo. Del Péndulo, qué razón tienes, menudo coñazo!!! pero en la época que lo leí me martirizaba leyendo los libros hasta el final,aunque no me gustasen. Afortunadamente ya no lo hago. Un beso.

Anónimo dijo...

Pues sí, Lula, yo tenía que haber hecho lo mismo. Con los dos autores, además, porque con Eco, después de "El nombre de la Rosa" pensé que todo el monte iba a ser orégano y no veas lo escaldado que salí. Y es verdad también lo último que dices, igual es que cuando nos vamos haciendo mayores perdemos hasta el pudor secreto, y ya nos importa un huevo dejar un libro a medias... es más importante no seguir perdiendo un tiempo que puedes emplear mejor.
Un beso para tí también.

k dijo...

Eu tamén aprendín cedo a non perder tempo con libros que non me aportaban nada. Non lembro se o aprendín co péndulo, pero é probable, coma case toda a nosa xeración, por outra parte.

Tes un meme no meu blog, se queres.

Bicos.

El detective amaestrado dijo...

En pocos días volveré a Michelena, a buscar mis lecturas no solo para este verano sino para todo el año...

Lula Fortune dijo...

En Michelena dan ganas de quedarse a vivir.Un saludo, detective.

Anónimo dijo...

Poderías poñer como lectura de verán a túa "outra" e estimulante vida de intrépida? Tes moitas personalidades ocultas que deberías desvelar.

Lula Fortune dijo...

Anónimo: non se pode dicir todo ¿o é que non viches O Último Tango?